Aprendiz de la Información: Presentando… La Ley General de Archivos en México (Parte I: Antecedentes)

El 26 de abril del 2018 en el Pleno de la Cámara de Diputados se aprueba la Ley general de Archivos, con una votación de 357 votos a favor, uno en contra y una abstención, esta Ley compuesta de 123 artículos y 17 artículos transitorios tiene como objetivo garantizar la organización, conservación y preservación de los archivos. Una forma de respetar el derecho a la verdad y al acceso a la información (importantes derechos humanos) y, además, busca fomentar el conocimiento del patrimonio documental de la Nación. A continuación, te hablaré un poco sobre su historia, sus disposiciones y la importancia que tiene para nosotros como profesionales de la información. Continúa leyendo, por favor.

La Ley General de Archivos capturó mi atención por dos razones. La primera tiene que ver con una de mis primeras entradas de Aprendiz: “Prácticas escolares: El Archivo General del Estado de Guanajuato y la Biblioteca Armando Olivares”. Ésta la hice después de haber asistido a unas prácticas escolares que se realizaron en Guanajuato durante mi tercer semestre en la Licenciatura de Bibliotecología y Estudios de la información. Una de nuestras actividades fue visitar el Archivo del Estado de Guanajuato. En la entrada mencionada, comenté un poco sobre la condición en que se encontraba dicho archivo y las razones por las que estaba así, de acuerdo a lo que nos comentaron.

Básicamente, las causas se reducen en tres factores: falta de presupuesto, falta de profesionales en los distintos estados de la República Mexicana y también falta de capacitación a las personas responsables de los mismos centros de documentación (a falta de profesionales de la información). Admito que, volviendo a leer la entrada, tal vez el sarcasmo que mostré no dejaba expresar la preocupación que surgió en mí por la falta de equipo y material para conservar en buen estado el único archivo reconocido del Estado de Guanajuato. Pero aún recuerdo como se me encogió el estómago cuando veía los archivos en cajas de Huevos Bachoco y también como estaban apiladas unas sobre otras en rincones oscuros a falta de estantes. El techo de lámina aumentaba la temperatura al grado en que era insoportable y, además, había cubetas de agua con trapos para mantener la humedad controlada. Eso ya hace cinco años.

La segunda razón por la que decidí comentar sobre esta Ley, tiene que ver con que después de casi 10 años, el paquete de normativas y lineamientos que conformaban los tres pilares legislativos en materia de transparencia, se han completado. Lo sé, quién diría que realizar políticas públicas era un trabajo tan tardado.

En teoría, La Ley General de Archivos forma parte de una iniciativa que comenzó en el Senado de la República que tiene el objetivo de hacer cumplir los derechos de acceso a la información y a la verdad. Entonces las reformas a las leyes, junto con la creación de nuevos lineamientos y organismos autónomos (como el INAI) formaron parte de las bases que terminan la obra con la recién publicada ley de archivos. Sin embargo, ¿cuáles son los orígenes y antecedentes de esta Ley? ¿quiénes participaron en su creación? ¿hay acaso respaldo de profesionales e investigadores con experiencia en el tratamiento de los archivos y especialmente, en su preservación?

En sus marcas, ¿listos?: comienza la historia de la Ley General de Archivos

De acuerdo con el Comité Mexicano de Ciencias Históricas, en noviembre del 2016 una comisión del Senado presentó un proyecto que sería la base para la Ley General de Archivos. Dicha iniciativa fue analizada y objetada por historiadores, especialistas en archivos, académicos y asociaciones civiles vinculadas con el derecho a la información y la transparencia. Al darse esta discusión, el 13 de diciembre del 2017 el Senado de la República aprueba la nueva versión y el 26 de abril del presente año es aprobada por la Cámara de Diputados.

Así que dos años después y gracias a la colaboración de un equipo interdisciplinario, nace esta ley y con ello, la temida cuenta regresiva, pero esto lo desarrollaré más adelante. Por ahora, he de comentar que la Ley General de Archivos que se aprueba tiene unos antecedentes a tomar en cuenta.

En diciembre del 2011, Ramón Aguilera Murguía escribió una columna de opinión sobre la “Primera Ley Federal de Archivos del México Independiente” y realizó un recuento del número de veces en que se había tratado de levantar un proyecto de ley así. La primera vez fue el 20 de febrero del 2004 con la publicación de los “Lineamientos Generales para la Organización y Conservación de los Archivos de las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal “y, que dispuso el artículo 32 de la “Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental”. Después el 5 de mayo de 2015 entra en vigor la nueva "Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública (LGTAIP)" que contiene 216 artículos y se realizó en conjunto con organizaciones civiles, comisionados del IFAI (Instituto Federal de Acceso a la Información Pública) y las opiniones de funcionarios de la administración pública federal.

Los tres pilares en materia de transparencia en México

¿Qué pasó con este punto? Pues al publicar la Ley de General de Transparencia, el gobierno estableció los principios, bases y procedimientos para garantizar el derecho de acceso a la información en posesión de cualquier autoridad. En este caso, la ley instruyó a las instituciones que deben estar comprometidos con la transparencia y el acceso a la información pública… el problema se encontró cuando las instituciones realizaron un análisis interno y observaron que carecían de áreas o profesionales que apoyaran en solventar estas solicitudes de información.

Así que, comenzó una bola de nieve. Las instituciones tenían que cumplir con sus obligaciones en materia de transparencia, pero las condiciones en que tenían su información no eran las mejores. Aquí es en dónde entra el Instituto Nacional de Acceso a la Información Pública (INAI), un organismo constitucional autónomo encargado de supervisar el cumplimiento de dos derechos fundamentales: acceso a la información pública y la protección de datos personales. De acuerdo con la Ley General de Transparencia uno de los objetivos de esta ley es regular la organización y funcionamiento del Sistema Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, que de acuerdo al artículo 31 de la misma ley busca coadyuvar en la elaboración, fomento y difusión entre los sujetos obligados de los criterios para la sistematización y conservación de archivos para localizar la información pública de acuerdo a la normatividad establecida.

Esto involucra diseñar políticas, establecer lineamientos para la implementación de un portal de la Plataforma Nacional de Transparencia y además establecer políticas en cuanto a la digitalización de la información pública en posesión de los sujetos obligados los cuales actualmente son 868 instancias que deben de cumplir con dichos artículos. Aparte del artículo 31, existe el artículo 54 que busca promover que en las bibliotecas y entidades especializadas en materia de archivos se prevé la instalación de módulos de información pública, la difusión entre instituciones públicas y privadas sobre transparencia, derecho de acceso a la información y rendición de cuentas.

Entonces, tenemos dos ejes de acción para el acceso a la información pública: cumplir con la normatividad en acceso a la información pública, difusión sobre la transparencia, derecho al acceso a la información y rendición de cuentas, y a estas agregar una tercera:

“Artículo 129. Los sujetos obligados deberán otorgar acceso a los Documentos que se encuentren en sus archivos o que estén obligados a documentar de acuerdo con sus facultades, competencias o funciones en el formato en que el solicitante manifieste, de entre aquellos formatos existentes, conforme a las características físicas de la información o del lugar donde se encuentre así lo permita.
En el caso de que la información solicitada consista en bases de datos se deberá privilegiar la entrega de la misma en Formatos Abiertos.”

Así que, en materia de transparencia, se consolidaron tres pilares: La Ley General de Transparencia, que garantiza el acceso a la información pública y la rendición de cuentas, extendiendo la lista de sujetos obligados, fomentando la cultura de la transparencia y aplicando lineamientos para que estos se cumplan; La Ley de Protección de Datos Personales, que busca proteger los datos personales mientras se consulta la información pública y la Ley General de Archivos, que apoyará a servidores públicos a realizar una gestión documental efectiva e incentivará la participación ciudadana que fomente la rendición de cuentas.

Ha llegado a su destino: La Ley General de Archivos.

El jueves 17 de noviembre del año 2016, el portal del AGN dio a conocer la iniciativa de la Ley General de Archivos y esto generó polémica, ya que varios grupos interesados comenzaron a saltar ante las propuestas realizadas, trayendo consigo voces críticas que se alzaron en contra de la Ley. En sí, se lanzó un comunicado en el que se desglosaron las disposiciones contenidas:

Las disposiciones relacionadas a la organización y conservación de documentos.
Establecer mecanismos de coordinación en materia de gestión documental con la finalidad de la conservación, resguardo, difusión y acceso a los archivos que generen las dependencias.
Normar criterios que permitan sistematizar la información de los archivos, estableciendo los métodos y técnicas para localización y consulta.
Establecer mecanismos homologados para localizar y clasificar los diversos tipos de archivos que generan los sujetos.
Determinar criterios y procedimientos relacionados con la consulta de archivos.
Establecer instrumentos de control archivístico, así como el cuadro general de clasificación, catálogos de disposiciones documentales e inventarios generales de archivos.

Sin embargo, la iniciativa fue criticada fuertemente y en el mismo comunicado de prensa, se encuentra el documento con antecedentes, diagnóstico y la propuesta de los artículos que incluiría la ley. Los cuales se desarrollarán en otra entrada.

Por ahora, es importante enfocarse en los sucesos históricos que nos llevaron al 26 de abril del 2018.
El 28 de noviembre del 2016 se realizó una audiencia pública para discutir la iniciativa de Ley General de Archivos y varios expertos realizaron intervenciones como el Dr. Alfredo Ávila, Dra. Mercedes Vega Armijo, Lic. Francisco Javier Acuña Llamas, entre otros profesionales y directores de archivos generales de estados, investigadores de Colmex, CIDE y UNAM. Las intervenciones fueron grabadas y están disponibles en YouTube. Durante todo el 2017 las noticias no quitaron el dedo del renglón y aparecieron varios reportajes que hablaban sobre la urgente necesidad de tener una Ley General de Archivos, además de pronunciamientos, cartas públicas y opiniones en medios públicos, sin embargo, durante dos años y una gran cantidad de profesionales, investigadores, políticos y organizaciones interesadas en el acceso a la información pública, así como también en materia de transparencia, trabajaron para poder crear nuestra Ley General de Archivos.

Después de dos años, los tres pilares en acceso a la información pública y transparencia han llegado a su destino y aunque como todo, siempre están a merced de un proceso de mejora continua, es importante destacar que son el comienzo de una demanda de profesionales urgentes a contribuir con la implementación de dichas normativas dentro de nuestras instituciones públicas y privadas.

Por ahora, dejo esta entrada como una introducción que habla sobre los antecedentes de la Ley General de Archivos y toda la historia que viene detrás. Los invito a seguir investigando sobre el tema con los enlaces que dejo como bibliografía, ya que es muy interesante y será importante en el futuro, ya que la implementación de dicha ley impactará en varios sectores de trabajo en los que somos requeridos.

Espero que sigan leyendo esta entrada para que ustedes puedan irse informando sobre el impacto y sobre todo el trabajo que hubo detrás para que esta Ley fuera aprobada.

Eso es todo por el día de hoy, nos leeremos hasta el próximo miércoles y agradezco que leas a esta Aprendiz de la Información