lunes, 22 de abril de 2013

Mesa Redonda: Aproximaciones al Libro y sus contextos.

Algo que no debe de faltar en un bibliotecólogo, según mi maestra de Introducción a la Investigación, la Mtra. Isabel Chong, es curiosidad. La curiosidad en esta ocasión, me llevo de vuelta al IIBI, en la torre de Humanidades II se realizó una Mesa redonda, esta vez en conmemoración del Día Mundial del Libro y de los Derechos de Autor. En esta Mesa se reunieron a tres excelentes ponentes y a un excelente moderador:

  • Dra. Adriana Berrueco García (Investigadora del Instituto de Investigaciones Jurídicas)
  • Dr. Omar Álvarez Salas (Investigador del Instituto de Investigaciones Filológicas)
  • Dr. Adolfo Rodríguez Gallardo (Investigador Emérito del IIBI)
  • Dr. Jaime Ríos Ortega (Director del IIBI y moderador)
Acompañada de compañeros de semestre, nos apresuramos a llegar al IIBI para asistir a tan interesante evento, el cual nos dejó con un buen sabor de boca y nos permitió ver con más profundidad al libro electrónico, los derechos de autor y los clásicos en la Licenciatura y en la sociedad. 

Primero, el Dr. Jaime Ríos preguntó al Dr. Adolfo Rodríguez, que nos contara cómo se desarrollaba el libro electrónico dentro de la Universidad, a lo que respondió que su avance era lento pero no por resistencia a este nuevo soporte, sino que más bien era por problemas de mercadotecnia. Pues aunque en la DGB se tienen alrededor de 400,000 libros electrónicos y revistas que se empezaron a adquirir desde 1997, los libros electrónicos por cuestiones de editoriales se tienen que comprar los libros por usuario, es decir, si cinco usuarios necesitan consultar determinado libro electrónico, se necesitan comprar cinco libros para cada usuario. Cuando le preguntaron sobre la tendencia del libro electrónico, él mencionó que a medida que incremente la demanda de este recurso, tendrá mejor oportunidad para abrirse en el campo, ya que así se podrán resolver estos problemas de mercadotecnia y podrá abrirse a mayores espacios. También hablaron sobre la percepción de la lectura conforme al soporte, que según una serie de estudios hay dos tipos de usuarios: los que leen a profundidad y los multitareas, que son usuarios que tienen mayor información pero menor profundidad (yo me considero un poco de los dos tipos de usuarios) y si consideraba que el acto de la lectura cambiaba de alguna manera ante este nuevo soporte, a lo que el Dr. Adolfo Rodríguez contestó que no,  que la diferencia yace entre la lectura de un solo documento o muchos a la vez. Con esto concluyó la participación del Dr. Adolfo para darle lugar a la Dra. Adriana, que nos explicó sobre los Derechos de Autor y el plagio (OJO con esta parte de la Entrada porque está buenísima toda la información que la Dra. proporcionó a esta pequeña aprendiz).

Ya de por sí, hablar de plagio es un tema delicado dentro de la Universidad, comunidades científicas y la sociedad. Por lo que, al principio pensé que este tema sería bastante complicado, primero de entender y segundo de poner atención (la verdad no soy muy dada a entender sobre estas cuestiones, pues no me han llamado mucho la atención) Sin embargo, tuve la grata sorpresa y honor de poder tener de ponente a la Dra. Adriana que explicó lo que el plagio y los Derechos de Autor pasan dentro de nuestro país. En primera instancia, le preguntaron qué era el plagio según la legislación mexicana, según la Dra. es la utilización que hace una persona de alguna parte de una obra sin autorización del autor y haciéndola pasar por propia. Todo esto respaldado por el Derecho de Cita de la Ley Federal de Derecho de Autor. Después el Dr. Jaime, le preguntó en su experiencia de docente, que opinaba sobre el plagio y las reglas académicas respecto a este en los trabajos de formación. La Dra. contestó que realmente se conoce poco sobre los Derechos de Autor y enfatizó en que los mismos universitarios que deben ser considerados como autores, no tienen una suficiente formación sobre sus derechos en cuanto a sus trabajos académicos. Por lo que es de vital importancia, enseñar las habilidades necesarias para crear documentos formales para ir contrarrestando y ejerciendo estas cuestiones que se ignoran de los Derechos de Autor. Es necesario una reforma a las matrículas de las carreras, para que esta propiedad intelectual que se publica con mucha despreocupación no pierda su novedad. Incluso recomendó que de menos se diera un semestre de estas habilidades que se consideran necesarias para un profesional.


El Dr. Jaime entonces, llevó la conversación a las bibliotecas, preguntando si los servicios que ofrece una biblioteca violan los Derechos patrimoniales y de Autor. La Dra. respondió que los servicios de préstamo no violan estos derechos, pero si las reproducciones por fotocopiado, sin embargo el Derecho de copia es muy difícil de ejercer y en cuanto a sus servicios digitales también deben de respetar todas estas disposiciones. Sólo en el trabajo de conservación que ejerce la biblioteca al pasar una información de un soporte a otro, se respetan los Derechos, esto es porque se puede realizar una copia privada que sólo puede usar el dueño del recurso, con fines de preservación, sólo se infringe cuando hay una difusión masiva sin autorización.

Al final, el Dr. Jaime comenzó a hablar con el Investigador Omar Álvarez, preguntándole si hay una necesidad de traducción de los clásicos. Según el investigador, hay que constatar que hay innumerables traducciones, que la fijación de estos textos está en proceso y la recuperación del pasado es algo que se está perfeccionando. Con cada generación, se sumerge y reconstruye todo el contexto, las premisas culturales y con ello, viene una diferente visión. Y con esas diferentes versiones, sí surge la necesidad de traducciones. Continuaron la plática, preguntando sobre la demanda actual de libros clásicos y si ha surgido interés por conocer estos autores, todo esto desde su punto de vista de docente. El Dr. Omar contestó que hay una serie de factores a considerar, como la demanda creciente de lecturas clásicas, la disciplina misma que se expande aquí en México y que incluso fuera de este ámbito hay un circuito de estudiosos de otras disciplinas y estudiantes que tienen necesidad y curiosidad por conocer a tales autores. Incluso ha surgido la necesidad de conocerlos en su idioma original y no en las traducciones (un ejemplo serían los estudiantes de Filosofía). Dentro del ámbito universitario ya se tiene una tendencia. Después, dio su opinión y habló sobre el libro electrónico sin desviarse mucho del tópico anterior, mencionando que abre enormes posibilidades, pues está en un proceso de expansión y posee un gran sistema de difusión en las redes, para los intereses comerciales, esto se vuelve una amenaza. El Dr. Omar habla del fomento al libro electrónico, pues dentro de las editoriales ya se tiene como política, que las nuevas ediciones cuenten con una versión impresa y otra digital. Además, permite el fácil acceso a documentos originales que no son tan accesibles, pues a través de la digitalización se potencia el estudio serio por parte de varios lugares e instituciones.

Y así llegamos a las conclusiones para poder finalizar esta Mesa, las cuales fueron bastante enriquecedoras. Pues mencionaban muchos datos importantes como por ejemplo:

Dr. Adolfo Rodríguez

Hablo de Tesiunam y sobre los permisos de autorización para que las tesis recibidas sean o no sean publicadas en Internet y en las bases de datos, cuestiones que hacen surgir diferentes opiniones en los usuarios. También habló del Open Access, resaltando que hace falta trabajar más en crear propuestas coherentes para poder poner en marcha este movimiento de gran importancia. Sobre la Literatura Clásica, menciona que sus amigos especialistas regañan por la falta de interés cuando realmente el problema yace en no poner estos recursos al alcance de la gente, incluso los clásicos vigentes. En cuanto a los Derechos de Autor, habló del caso de Google que trató de digitalizar libros, que causaron el reclamo de diferentes autores y también mencionó a los libros huérfanos de autor y al surgimiento del Derecho de Posesión, que por ser únicas copias de ejemplares, se prestan a bibliotecas para su duplicación y con esta copia, se tiene el derecho de cobrar por ello.

Dra. Adriana Berrueco

Dijo que desde la posición de los autores, toda transmisión de derechos patrimoniales debe ser onerosa y temporal, por lo que hay que tener una sensibilización de estos aspectos. Mencionó que la UNAM no es titular de los derechos sobre las obras, sólo los becarios tienen una excepción, además que la UNAM a veces, fija en un soporte (cualquier tipo de soporte) investigaciones, conferencias y demás material intelectual sin pedir autorización de los investigadores extranjeros. Recalcó la falta de protección de los editores dentro de México que es un hecho que se tiene que trabajar para poder tener mayor control sobre estos problemas. Además, agradeció al Dr. Jaime Ríos por estos espacios y conferencias multi disciplinarias que realiza y que le dan fuerza a las humanidades.

Dr. Omar Álvarez

Le pareció muy interesante esta invitación porque invita a superar prejuicios, como ejemplos, que los estudiosos consideran que los clásicos son inaccesibles y el destinatario los considera obsoletos, cuando en realidad los clásicos centraron las bases de la sociedad actual y en la que nos desenvolvemos. En cuanto a la propiedad intelectual, mencionó que antes, se le consideraba como patrimonio común y esto le permitía la libre circulación por el bien común.


Para esta aprendiz, el asistir a este tipo de eventos que ofrece el IIBI, es un verdadero placer porque siempre salgo con nuevas interrogantes, nuevos conocimientos y sobre todo con renovadas ganas para continuar en esta disciplina. Esta vez, el aprender sobre las percepciones del libro electrónico (que se desarrolló en la entrada pasada, para tener un panorama más amplio en relación con esta entrada) y sobre los Derechos de Autor. Ambos elementos son importantes dentro del campo actual de la Bibliotecología  que llaman mucho la atención. Por lo que es un placer para mí el escribir estas líneas sobre tan interesante y excelente conferencia. Dejo el link por si les da curiosidad saber sobre que más hablaron (tantas cosas que mi cerebro no pudo procesar todas en esta entrada).

Por mi parte sería todo, espero que tengan un excelente día y gracias por leer a esta aprendiz.


El libro electrónico

Entre los lectores, a veces pregunto sobre que temas les gustaría que hablara, uno de ellos me pidió por favor que desarrollara al Libro electrónico este recurso que logra que los bibliotecarios y todos los involucrados en el mundo del libro (desde lectores hasta autores y comerciantes). Y muchos tenemos dudas, opiniones y demás argumentos a favor o en contra de este soporte, así que, para empezar esta entrada, voy a dejar en claro lo que es un libro electrónico. Desde la "revolución de las comunicaciones" con la llegada del Internet o la World Wide Web, ha cambiado mucho el manejo de nuestra sociedad, sus comunicaciones y la forma en como se va desarrollando.

Muchos utilizamos la Internet, pero realmente pocos se interesan por saber realmente qué es este medio de comunicación tan importante dentro de la sociedad actual. Según Giovanni Sartori:

"Es un prodigioso instrumento multitarea: transmite imágenes, pero también texto escrito, abre el diálogo entre usuarios que se buscan e interactúan entre ellos y permite una profundización prácticamente ilimitada en cualquier curiosidad."
Gracias a esta herramienta, han surgido muchas posibilidades para desarrollar en los distintos ámbitos que integran una sociedad. El libro electrónico, es una de estas posibilidades positivas que surgieron, en apoyo a los ámbitos culturales y educativos. Sin embargo, ¿qué es el libro electrónico?  

Hay muchisimas definiciones para este recurso tan importante, de las cuales presentare solo tres:

  1. Es una obra literaria de cierta extensión, expresada en uno o varios medios (texto, imágenes y sonidos) y en uno o varios textos ligados... la cual, además, es adecuadamente almacenada lógica y físicamente en un sistema de cómputo electrónico digital, de manera tal que la obra puede ser recuperada para el disfrute de varios lectores o uno sólo. (según Heberto Reynel Iglesias). 
  2. Es un mecanismo electrónico que permite almacenar una gran cantidad de información de tipología distinta (los medios antes mencionados), organizada conceptualmente del mismo modo que uno de papel, pero que permite la interacción con el objeto.
  3. Se refiere a una publicación no periódica, es decir que se complemente en un solo volumen y que puede contener cualquier morfología de la información.
De las tres definiciones, podemos recuperar que es una obra con distintos elementos, ya sean texto, imágenes, sonidos y almacenada de forma digital. Curiosamente, lo que creemos que es algo muy nuevo, realmente viene existiendo desde 1971 y muchos investigadores no han llegado a una definición concreta de lo que es un libro electrónico (que es diferente a un libro digital, hay que recalcar que el libro digital es un libro impreso transformado en bits). Por lo que con más razón, este recurso no tiene una identidad definida como tal, hasta ahora.

Ya que tenemos un poco claro lo que es un libro electrónico (y digo tenemos porque sinceramente yo no había profundizado mucho en el tema), ahora vamos a adentrarnos un poco, a los debates que han surgido y a las posibilidades que este recurso ha abierto para la sociedad. La primera más mencionada es la cuenta regresiva del libro impreso, es decir, gracias a este recurso cada día la producción del libro impreso ha disminuido, o al menos eso es lo que muchos piensan. La verdad, como estudiante de Bibliotecología, nos muestran otra realidad y esta es que debido a que la producción del libro electrónico es bastante costosa, es difícil poner a disposición estos recursos a los usuarios, aunque si se han tratado de utilizar para que todos podamos tener acceso a ellos, aún falta muchísimo para lograr que el libro impreso se "extinga" (y pongo entre comillas esta palabra, porque realmente se ve muy difícil que esto pase en los próximos años). Esto es porque es más fácil adquirir tres ejemplares de un libro impreso a adquirir libros electrónicos que se venden por cada usuario que los consulte, es decir, si un libro es consultado por cinco usuarios, hay que comprar cinco ejemplares para dar al usuario (esto lo mencionó el Dr. Adolfo Rodríguez Gallardo, actual Director General de Bibliotecas). Además muchos de los lectores, tienen problemas al leer en los aparatos que permiten leer este libro, por vista cansada, la luz brillante, etc. Y los aparatos que permiten la lectura de estos libros no son regalos o cosas que crecen en los arboles. 

Es verdad que es un recurso muy importante, pero que es un poco difícil de implementar por completo dentro de una biblioteca e incluso de poner a disposición de todos los que quieren acceder a la información, como todo en la sociedad, estos recursos llegan a algunos cuantos. 

Aunque sus ventajas, han permitido que la mayoría de las personas sueñe mucho con las puertas que este recurso ha abierto y sus desventajas le han llevado a ser un objeto rechazado bruscamente, el libro electrónico es un recurso polémico que ha ganado importancia en los últimos años y espero que lleve a mejores posibilidades y permita ayudar a los bibliotecólogos en sus labores profesionales, al usuario en el fácil acceso a la información y a los demás a interesarse por la lectura. Pues he de admitir, que al menos uno de los beneficios de los libros electrónicos es el de promover la lectura al volverlo interactiva e interesante para personas que consideraban esta actividad algo tedioso y aburrido. 

 Al final, el libro electrónico es y seguirá siendo una herramienta importante y en mi opinión es un recurso muy útil que me ha permitido el poder leer de noche con la luz interna de mi aparatejo Mac, el tener alrededor de 700 libros en mi biblioteca digital a mi disposición y también me permite fomentar más en mi el hábito de la lectura (pues los libros impresos, me encantan, los adoro pero a veces en la mochila llevar tres libros impresos es un poco estorboso). Siguiendo con lo personal, muchos de mis profesores, nos han dado lecturas en formato electrónico para poder tener mayor acceso a ellas y no turnar un solo ejemplar de tal o cual libro entre cincuenta personas, lo cual aligera mucho. Además que existen muchos sitios que ofrecen gratuitos estos libros y promueven el trabajo del autor para que se de a conocer.

Muchas cosas se pueden escribir sobre el libro electrónico, sólo le arañe poquito para ver que me encontraba y vaya que salí con mucha información interesante que en el transcurso podré desarrollar en otras entradas, por ahora me despido con el aviso de que la próxima entrada será el 23 de abril Día Mundial del Libro y los Derechos de Autor.

Bonita noche y gracias por leer a esta aprendiz de la información.

martes, 16 de abril de 2013

Prácticas Escolares: El Archivo General del Estado de Guanajuato y la Biblioteca Armando Olivares (parte 1)

Las siguientes dos entradas van a ser de puras experiencias y anécdotas, esto es debido a que la semana pasada, tuve el placer de ir a Guanajuato para visitar la Biblioteca Armando Olivares y el Archivo General del Estado de Guanajuato. 

Fueron días agradables y llenos de experiencias que me hicieron crecer como estudiante de la licenciatura, como persona consciente de la falta de interés por estos centros importantes para el desarrollo de la sociedad y también como futura profesional en la carrera de Bibliotecología y Estudios de la Información. A continuación hablaré sobre el Archivo General del Estado de Guanajuato, el cual dejo en mí unas profundas marcas que me abrieron los ojos ante las siguientes situaciones:
  1. Que la carrera realmente queda mucho a deber en cuanto a la oferta de profesionales para que cuiden y trabajen en las bibliotecas y diversos centros que necesitan de bibliotecólogos (científicos de la información, gestores de la información, bibliotecónomos o cualquiera de los mil ocho mil nombres que se nos ha dado).
  2. La falta de presupuesto en estos centros son un grave problema, además de la falta de conocimientos por parte de los encargados para poder saber que es lo que mejor conviene adquirir a estos centros (bibliotecas, archivos, centros de cómputo, etc) para el cuidado, preservación y manejo de estos recursos. 
  3. La falta de capacitación y formación profesional (punto que está estrechamente relacionado con lo primero) es un problema que no permite a estos centros ser explotados adecuadamente  por los usuarios.
Los puntos anteriores fueron los que más causaron un impacto dentro de mí, como estudiante de la carrera y también como amante de los libros y archivos (culpa de mi curiosidad y de mis ganas de seguir aprendiendo). Fue un shock el ver su modernísimo sistema para mantener la humedad dentro de los establecimientos que guardaban los archivos históricos y ejecutivos en el Archivo General. Imaginen entre los estantes un sistema complicado compuesto por un travesaño de material resistente recubierto por una serie de hilos entretejidos que reposaban en un excelente recipiente lleno de agua que se evaporaba con el calor de una serie de paneles metálicos en lo alto. Es decir, un palo de escoba con una jerga encima de una cubeta con agua evaporada por los techos de lámina y los fuertes rayos solares. El colmo fueron los archivos guardados en cajas de detergente Roma y cajas de Huevo Bachoco (que hacía siglos que no veía una caja de ese tesoro que ahora es manjar de pudientes). 

Esta visita, dejo en claro la falta de atención que tienen en los centros encargados de cuidar la información. En la visita, a pesar de tener instalaciones bonitas, la verdad son meras adaptaciones de edificios, no son construcciones que cumplan con el objetivo de ser funcionales para la organización, preservación y cuidado de estos materiales preciosos que guardan retazos de memoria del Estado. Incluso esta aprendiz y un querido amigo pegaron un brinco tremendo al ver todo este tipo de fallas en estos dos recintos importantes, además que el sistema de organización dejaba mucho que desear. Y no hay manera de reclamarles porque francamente, estábamos hablando con abogados, historiadores, ingenieros y personas que tenían una formación "Técnica" (y pongo las comillas, porque realmente ni siquiera poseían un título de técnicos en biblioteconomía o archivística, solo estaban capacitados por cursos y la formación basada en experiencias profesionales). 

Incluso me da un poco de cruda moral el hablar así de personas que tan amablemente nos dieron una visita guiada por estas instalaciones, explicándonos cada uno de los elementos que cuidan, que protegen y que trabajan a diario para que estos materiales estén bien, en condiciones de ser utilizados por un usuario curioso o que necesite de esta información. Desde la historiadora encargada del taller de restauración hasta el encuadernador que heredó tal oficio de su padre, realmente se observaba ese ahínco y dedicación en su trabajo y eso es algo que aprecié muchísimo, durante toda la visita. Al fin y al cabo, la mayoría de esas personas conocen ese valor importante que tienen estos archivos y acervos para su estado e intentan por todos los medios que estos recursos estén bien.

Sin embargo, el sentimentalismo se desvanece al recordar de nuevo las cajas de Huevo Bachoco (risas). A veces es necesario realmente asestar un buen golpe para poder lograr conciencia en las personas y que estás se interesen. Pero estos golpes no llegan, al menos no a muchos. Para esto, creo que nuestra carrera puede influir mucho al respecto.

 La Bibliotecología es una disciplina que se requiere, mejor dicho, que se necesita aplicar urgentemente a todo lugar que maneje información, sobre todo si este lugar es el guardián de las memorias y papeles importantes del estado o de la Nación (¿en serio confiarías en alguien que guarda tus declaraciones notariales en una caja de Huevos Bachoco o de jabón Roma?, NO INVENTEN). El hecho de que esta falta de recursos económicos, de profesionales y de efectividad afecte de esta manera a las bibliotecas y archivos, son casos que los futuros bibliotecólogos y los actuales profesionales deben de empezar a preocuparse por arreglar. Sé que es de gran importancia también el definir la carrera, pero como ya se ha mencionado antes, a veces la teoría es mucho mejor si se ve aplicada directamente a un objeto que la sociedad use cotidianamente (en este caso los archivos y bibliotecas). Y eso es algo que últimamente, se está desviando mucho de la vista de los profesionales de la carrera (que pertenecen a los mil ocho mil nombres para la carrera), aunque es verdad que existen en México unas cuatro escuelas que ofrecen en su formación una gran influencia en procesos técnicos y administrativos, la mayoría de estos profesionales se van a empresas privadas o se dedican a otros proyectos, dejando abandonados estos centros de gran importancia. 

Esta entrada está plagada, de mi opinión, así que no se lo tomen a mal. La verdad son estos casos los que te ponen a analizar que onda con la realidad que no te explican muy bien en la escuela. Te dan una idea pero al final, no te imaginas que llegan al extremo de las cajas Bachoco y de los sistemas ultra modernos de control de humedad (leáse con bastante inquietud y sarcasmo). 

En esta entrada, deposité mucho de mí, como aprendiz y espero realmente haber contribuido un poco a dar esos golpes que despierten la conciencia de los demás. Me despido por esta noche con la promesa de ponerme al corriente en las entradas, pues se supone que debería tener 4 entradas por mes. Sin embargo, me quedó muy corta y sólo he publicado 3 por mes. Quizás sea por las mil ocho mil cosas que siempre estoy haciendo (risas). 


Gracias por leer a esta aprendiz de la información.



domingo, 7 de abril de 2013

El mundo del libro en los Siglos XV y XVI en Europa y la Nueva España según los impresores.


Ya he abordado temas de la Licenciatura, de Bibliotecología social, de mis experiencias y también de los antecedentes bibliotecológicos en México. Curiosamente, no he hablado del importante ítem que logra que la profesión de bibliotecario como la conocemos se mantuviera desde la Edad Media hasta nuestros días. Este ítem es el magnífico libro, que causa desde obsesiones fuertes como la bibliofilia y conductas extremadamente destructivas como la bibliofobia. ¿Cómo un conjunto de más de 49 hojas, con un lomo y un tema desarrollado con base en fundamentos puede causar tantos debates, acciones e ideas? Realmente, el libro siempre influye en el pensamiento del hombre, lo alimenta y le da siempre algo en que reflexionar, y dice Gandhi:
"Cuide sus pensamientos porque se convierten en palabras. Cuide sus palabras porque se convierten en acciones. Cuide sus acciones porque se convierten en hábitos. Cuide sus hábitos porque se convierten en carácter y cuide su carácter porque se convierte en su destino. En lo que pensamos es en lo que nos convertimos."
En estas palabras se encuentra una gran verdad, que muy pocos realmente ponen en práctica, lo que nos dejan los libros, automáticamente lo pensamos y tratamos de llevarlo a lo que vivimos y lo que queremos. Así que hablar del libro, es hablar de un objeto en el que se lleva la memoria de la humanidad, sus ideas, su impacto y su belleza, a lo que contribuye en el alma del ser y en su mente. Tengo un amigo que siempre me dice: "Ponte a leer", "Ocúpate y ponte a leer", "En lugar del chat, ponte a leer". Siempre le hago una cara de fastidio y me irrita porque pienso que lo usa de excusa para no hablarme (risas), pero al final siempre le hago caso, me pongo a leer y entonces otros me dicen: "¿Por qué no haces nada?, anda ayúdame con el quehacer.", " Oye estás leyendo, mejor platiquemos del juego de ayer", etc. Al final, el libro y yo estamos en un constante ir y venir de comentarios de personas que no entienden que leer no es hacer nada y entre las personas que siempre dicen que leo material de mala calidad (omitiendo a mi amigo, claro,  hablo de otras personas). Y estoy segura de no ser la única. 

El libro es importante en el desarrollo del ser humano, dentro de su formación en todos los aspectos toma un gran papel y me parece muy buena idea desarrollar el mundo del libro entre los siglos donde su comercio y producción fue bastante grande. Hablo de la época del Renacimiento, con la invención de la imprenta y el desarrollo del ser humano como individuo. Así que comencemos con el tema.

Durante los Siglos XV y XVI se comenzaba a vivir una época de florecimiento cultural, intelectual y comercial. Como ya se mencionó antes, el descubrimiento de América, el movimiento humanista e individualista que comenzaba a dominar todas las áreas de conocimiento y artísticas. Tanto en Europa como en la Nueva España estaban surgiendo múltiples personajes encargados de la producción de lo que se volvió un objeto importante en el comercio y en el desarrollo cultural dentro de la sociedad, el libro. En Europa con impresores y editores como Aldo Manuncio, Christopher Plantin,  La familia de los Estienne, Anthon Koberger y Arnaldo Guillén de Brocar, entre otros; mientras que en la Nueva España al principio surge el monopolio de Juan Pablos, para después dar paso a Antonio de Espinosa, Pedro Ocharte y Pedro Balli, entre otros reconocidos impresores que se encargaron de esparcir este recurso y explotarlo en aquellos años. Con esto claro, podemos desarrollar como este mundo del libro fue creciendo alrededor de este período de tiempo significativo para la humanidad.
Sabemos que la imprenta inventada por Gutenberg, abrió paso a que se abriera una corriente nueva en el comercio con un nuevo objeto que se podía explotar mucho para beneficios económicos, culturales y sociales (como se ha estado repitiendo en la introducción), por lo que empezaron a surgir impresores que le daban un toque a sus publicaciones, logrando que el libro cambiara y evolucionara a lo largo del tiempo. Podemos usar  muchos ejemplos en Europa, como Aldo Manuncio que en uno de sus trabajos imprimió caracteres griegos con la escritura común de la época,  además de reducir el tamaño de los libros, nuevos tipos de ornamentos y difundió el uso de oros en el arte de la encuadernación.[1] En Alemania, surgieron estampas con forma de libro lo que ayudó mucho al desarrollo de la xilografía, aunque se le daba más prioridad a los aspectos económicos. [2]Aunque no sólo en las grandes potencias se daban estos grandes avances, también se dieron avances en el desarrollo del libro en los Países Bajos, más específicamente en Amberes, Christopher Plantin, empezó a imprimir libros políglotas, es decir con más de un idioma y con la calidad que ofrecía sus trabajos marcaron una época en la historia de la edición.[3] Sin duda podemos llenarnos de ejemplos en el continente europeo, que de alguna manera contribuyeron al desarrollo del libro y con ello crear verdaderas piezas de arte o de gran valor. Ahora vamos al Nuevo Mundo, justo en la Nueva España para ver como el libro fue creciendo y desarrollándose.
Juan Pablos llega por septiembre u octubre en el año de 1539 estableciéndose en la Nueva España enfrente del palacio del Obispo Zumárraga, la cual se le denominó como la casa de las campanas. Así Juan Pablos empezó a imprimir bajo el nombre de su jefe Cromberger, hasta que en 1540 Cromberger fallece y Juan Pablos empieza a imprimir bajo su propio nombre, designándose como el primer impresor en la ciudad de México.[4] Su monopolio en la impresión duró lo suficiente como para que tuviera cuatro etapas importantes de desarrollo. Una vez establecida esta imprenta, comenzaron a seguir sus pasos, excelentes tipógrafos como Antonio de Espinosa y Pedro Ocharte, que lograron adaptarse a los aspectos normativos para que su producción no tuviera problemas en cuanto a su distribución y con ello reforzando la mentalidad de la sociedad a someterse a las normas religiosas que en ese momento se aplicaban.[5] Cabe mencionar que uno de los criterios a respetar era que todas las publicaciones dijeran una verdad que sería única e invariable, pero surgían aquí conflictos, debido a que había problemas en cuanto a que lenguaje se usaría para publicarlas ya que el lenguaje castellano permitía más la expresión de ideas que las lenguas mesoamericanas no podían transmitir tan fácilmente.[6] Otro problema era el que los evangelizadores procedían de diferentes congregaciones y no compartían muchas ideas en común. Por lo que la producción de libros era limitada. Muchos de los libros de la Nueva España contenían grabados y estaban publicados en diferentes lenguas debido a la gran mezcla que habitaba en la Nueva España, sus títulos eran bastante largos para dejar en claro su contenido a la Santa Inquisición que era muy estricta con las reglas porque temía que las ideas que empezaron a surgir en el Renacimiento al llegar a la Nueva España incitaran a una rebelión a los indígenas.[7]
Al leer con detalle, observé que estaba más aferrada a las temáticas de tipo religioso que en Europa, esto se debe quizá a que en Europa comenzaba a florecer una nueva forma de pensar y de actuar. Mientras que en Nueva España la opresión y censura estaba mucho más arraigada a la sociedad, además que demuestra que el libro tenía más ornamentos y variantes en la producción europea (esto tal vez se deba a que la mayoría del comercio del  libro se ejercía y además se tenía más materia prima y mano de obra con la que trabajar) que en la Nueva España,  sin embargo ésta no era inferior a las grandes potencias que en ese momento estaban sobresaliendo, sino que también tenía un fuerte desarrollo en los ámbitos económicos y artísticos. Sin duda el libro se transformó de manera radical en este período significativo de tiempo y me agradó mucho el seguir esta evolución y con ello el poder distinguir las diferentes transformaciones que sufrió el libro.

Bibliografía consultada
Tagle, Matilde. Historia del libro, Texto e imágenes. Buenos Aires: Alfagrama Ediciones, 2007.
Torre Villar, Ernesto de la. Breve historia del libro en México. 2a. ed. México: UNAM, Dirección General de Fomento Editorial, 1990.
Ramo Soriano, José Abel. Los delincuentes de papel: Inquisición y libros en la Nueva España. México: INAH, FCE. 2011.




[1] Tagle, Matilde. “El libro en el siglo XVI”. Historia del Libro, Texto e imágenes. Buenos Aires: Alfagrama, 2007, p. 165 y 166.
[2] Ibíd., p. 167.
[3] Ibíd., p.  170.
[4] Torre Villar, Ernesto. “El origen de la imprenta en México”. Breve historia del libro en México. México: Dirección General de Fomento Editorial, 1990,  p. 38.
[5] Ibíd., p. 40.
[6] Ibídem.
[7] Ramo Soriano, José Abel. “La censura de libros”.  Los delincuentes de papel: Inquisición y libros en la Nueva España. México: INAH, FCE. 2011. P. 37.

Como ya habrán notado, esta entrada es diferente a las demás, tiene la bibliografía consultada y también contiene notas a pie de página con locuciones latinas. Verán las razones de este cambio son dos: La primera es para proporcionar mis fuentes consultadas en caso de que a otros les interese profundizar el tema y la segunda es porque quiero escribir con un enfoque un poco más serio en el desarrollo de temas. El fin de este blog es el de practicar el arte de la escritura, aprender y compartir lo que aprenda con respecto a mi carrera. Si no agrada mucho este cambio, les agradecería muchísimo que me lo hicieran saber, el chiste es que disfrutes la entrada y pues en el transcurso aprendas cosas buenas. 

Por mi parte es todo por esta noche. Gracias por leer a esta aprendiz de la información.